"Nunca como a ella, nadie como ella, jamás; ni antes, ni después. Nadie nunca." Ojalá las palabras fueran mi fuerte.
Hoy quiero escribir uno de esos momentos felices genéricos, uno que ya no tenga tu nombre grabado por todos lados -pero que sea tuyo-; recordar una cojida y venir a ponerla aquí, alguna salida, una sonrisa, palabras tuyas… por mera nostalgia, de esa que se siente cuando sabes que ya no tienes algo y que no volverá. Tal vez tambien por saber que puedo escribirlo y que entonces ya perteneces al montón de cosas que son mis recuerdos, ese montón que se confunde con el otro que son las cosas que uno va aprendiendo.
Entonces tengo la hojita en blanco, trato de fijar la imagen pero empiezo a divagar sin poder conectar la serie de puntitos que son todos esos recuerdos. ¿Será que aún me dueles y no quiero recordarte?
Me dijeron que aún me falta sacar mucho.
Tal vez cuando duelas menos.
- ¿Y tu vieja?
- Mhhh ¿Pues sí sabías que no es de aquí, no? Un día se fue a su pueblo, nos seguíamos escribiendo y de repente dejó de hacerlo
- …
- Yo digo que se la tragó una ballena, ya ves que por allá abundan. Tal vez algún día regrese, como ese tal Jonás y Moby Dick. O algo así.
#include mujeres
- Eres lo que escuchas -
La taza de café que marca el inicio de otro clásico día de rutina en el trabajo, sin mucho que hacer, sólo escuchar música, leer, hurgarse la nariz de los recuerdos…
Escucho toda esa música elegida por ti (para mi) y en algunas canciones te imagino bailando, sonriendo, cantando, siendo feliz. Me gustaría que estuvieras aquí al lado para explicarme cada una. Generalmente las canciones que nos gustan y presumimos a los demas tienen una historia, son especiales por algo. A veces sólo nos gustan y ya. Pero al final todas tiene su carga de memorias. Al final todas son una pequeña parte de lo que somos hoy.
- Saciedad -
Soy de los que se clavan tanto con todo lo que les gusta que pueden llegar a desgastarlo hasta el aburrimiento. Respirar, probar, morder, tragar, atragantarse, saborearlo, devorarlo, digerirlo, transpirarlo, compararlo, aprehenderlo y aprenderlo, hacerlo parte de mi, llegar a su esencia. Soy del tipo que puede repetir una canción todo el día, toda la semana y escuchar esa sola canción sin notar la existencia de lo demás, como si fuera lo único necesario. Luego se me pasa y la canción se va al montón junto con las demás, a formar parte de esa colección desorganizada que es el soundtrack de lo que me pasa.
Contigo nunca fue así, nunca pude tenerte siempre que quise, cuando quise. Te mantuviste elegantemente disponible a tu voluntad, me diste espacio, de modo que nunca me aburrí, nunca sentí esa flojera de buscarte al día siguiente. Nunca pude sentir esa saciedad. Nunca llegué a conocer tu escencia.
Y esa es tal vez la causa de este dolor.
- MELANCHOLIA -
Hubo aquella vez que me soltaron un nada clásico: “no eres tú, es mi prima” y algo que iba bien se fue al caño de un día para otro sólo porque la prima me había visto primero y la otra pocos huevos no quiso echarse ese tiro.
La siguiente vez una relación-no-relación que estaba muy cómoda y a gusto, para ambos. Y de repente un “Ah, ¿no te había dicho? Me voy a casar”.
Hubo otra donde huí. Cuando tú eres el que no quiere más compromiso, el que pone ojos de plato y distancia de por medio cuando escucha un “¿Te imaginas despertar siempre así, juntos?”.
En otra, ambos dejamos perderlo todo. Nadie llamó a la otra persona. Tácito.
Y ahora tú. “No te quiero lastimar”.
“the lost redhead was just another smash in a lifelong loss ...”
- Easy come, easy go -
Hay cosas que te son sencillas, programar por ejemplo. Resolver un problema del mundo real, ponerlo en líneas de código que entienda la máquina y hacer que trabaje para ti. Y así el álgebra, el trabajo… Cosas a las que por ser fáciles no les das su justo valor.
Y esa es mi historia.
Todo en la vida se me ha dado tan fácil, como caído del cielo, prácticamanente nunca me he tenido que esforzar por obtener algo. Y es por eso que no sé pelear por lo que quiero. Es por eso que soy de los sufren mucho cuando pierden algo pero no sabe que hacer para recuperarlo.
- Perversiones -
Pude hacer de ti mi fetiche. Aunque la verdad no me imagino que hubiera pasado de aceptar convertirte en la personificación de mis fantasías y mis sueños.
- epílogo -
Ojalá la vida no fuera tan complicada como para estar juntos a pesar de todo. A pesar de ti y de mi.
Me doy cuenta (de nuevo) que soy perfectamente olvidable, desechable, prescindible.
Gracias por la lección de humildad.
…I had a woman.
Y era hermosa, con el cabello largo más allá de la cintura y ese rizado natural que hipnotiza, que hace imaginarte que eres pequeñito y que te arrullas y duermes en él mientras lo miras y lo enredas entre tus dedos. La piel tan blanca que guardaba las marcas de mis manos. Unas piernas fuertes y torneadas, pies delicados y bellos, perfectos. Una cadera amplia, del tipo que cuando la tomas por la cintura tu mano se sostiene sola al llegar ahí, con ese caminar característico, y unas nalgas preciosas. Dedos largos en unas manos finas que me encantaba mirar entrelazadas con las mías. Una mujer hermosa por donde la viera.
Por si fuera poco era inteligente y sabía de muchas cosas, nunca me cansaba de aprender de ella. La admiraba, me fascinaba, me gustaba… me enamoré. Le encantaba la música, y quien no va a estar feliz con una mujer a la que le encanta la música, que baila a la menor provocación.
¿Yo? No tenía nada que ofrecerle, ya ves que siempre he sido el de bajo perfil, el que sabe nada de todo y que nunca ha sabido expresar lo que siente, así que sólo tenía una manera de hacerle sentir lo mucho que quería estar con ella. Dijo que la hacía feliz.
Y ella a mi.
Una linda historia.
¿Luego? Llegó el día en que se fue. Yo sabía que ese día llegaría, que sólo estaba de paso, por un tiempo. Me había hecho a esa idea desde hace mucho tiempo pero me gustaba engañarme no pensándolo, como si nunca fuera a pasar. Se fue y no nos dijimos adiós. Nos seguimos escribiendo, extrañándonos. Y todo era bonito. Todo seguía siendo bonito aún en la distancia, como mantener algo encendido, una pequeña esperanza de que estaríamos juntos de nuevo.
Hasta que un día dejó de escribir, intempestivamente, de un día para otro todo se acabó. Raro ¿no? Y lo resentí.
Pasó más tiempo y regresó, pero ya no era la misma, se había vuelto fría, calculadora, dijo que no sabía lo que quería, pero tenía planes, planes en los que obviamente yo ya no estaba. Yo traté de aguantar, de acoplarme, de ser feliz con poquito amor, pero pronto me di cuenta que no soy así, que nunca lo he sido, que la extraño y la quiero demasiado como para sólo tener una fracción de ella, como para pasar tantos días sin saber de ella ni escuchar un “mi amor” y verla sonreir.
Durante tanto tiempo me acostumbre a cosas muy bonitas y cuando ya no las tuve…
Y tomas una decisión apresurada, crees que te vas a sentir mejor abandonando todo, dándote la vuelta y pretender que no pasa nada, que será fácil sobrellevar la ruptura. Idiota. Luego intentas recuperar lo perdido, pero la verdad es que tampoco has sabido pelear nunca por lo que quieres.
Así que aquí estás, de nuevo como antes, recogiendo pedazos de lo que fue.
Tattooed all I see, all that I am, all I'll be.
Escribir ideas en piezas de 140 hace daño cuando quieres sentarte a escribir y te das cuenta que ya has dicho muchas cosas, entonces es más dificil venir y tener una buena catarsis.
Ahora me veo obligado a hacerme a la idea de que ya no estarás conmigo y aunque no me has dicho nada, no quiero seguirme creando falsas expectativas, el madrazo sería peor. En caso de que haya un madrazo. Pero si lo hay… Y asi estoy todo el tiempo, como en una cuerda floja, sé que al final caeré; de un lado ya no estamos juntos y del otro lado seguimos como antes.
Unas veces acepto que todo termina, que desde el principio supe que esto pasaría, que me dije que estaría preparado y que di lo mejor de mi para hacerte felíz mientras éramos nosotros, que no debo preocuparme y que después de sentirme mal, lo superaré. Entonces respiro aliviado, me ocupo, salgo, hago cosas mientras espero lo que tienes que decirme. Pero otra veces me digo que todo está sucediendo muy rápido y no alcanzo a comprenderlo, que no quiero que pase, que quisiera oir que sólo estás pasando por un mal momento y todo estará bien y que todo esto ha sido sólo un mal sueño y regresamos a hacernos felices y compartir. Segun mi poca capacidad para entender, eso es lo que está pasando, confusión. Y debo esperar. ¿Qué si quiero aguantar a una vieja loca? Sí.
Releo esos fragmentitos de felicidad juntos y es cuando no creo posible que todo desaparezca tan fácil, como tratar de meter un elefante debajo de la alfombra para que nadie lo note, y nadie lo notaría con una alfombra del tamaño correcto, pero el elefante sigue ahí. Se me hace dificíl creer que de un día para otro estes pensando que no vale la pena continuar, que no te dejes querer, que te encierres en la distancia y la frialdad. Tampoco sé si te quise poco y estás aléjandote porque no es suficiente o si te quise mucho, tanto que te asusté.
Pero vámonos con calma, toma tu tiempo, así ambos sabremos que estamos listos para continuar juntos o cada quien por su lado y que no es una decisión apresurada. Los momentos amargos serán nada cuando pueda hacerte feliz de nuevo con lo que soy.
“te quiero, me faltas, te extraño”
#include tú